Semana Mundial de la inmunización

Las vacunas ayudan a salvar vidas, ya que protegen de enfermedades potencialmente mortales y altamente infecciosas, sobre todo en el caso de los niños que aún tienen sus sistemas inmunitarios en desarrollo; y a largo plazo, evitan la reaparición de enfermedades contagiosas como el sarampión, la difteria y la poliomielitis, erradicados ya en muchos países.
Es crucial reconocer y trabajar por que los programas nacionales de inmunización se rediseñen a fin de garantizar una protección integral a las personas a lo largo de toda su vida; deben de centrarse en la primera infancia y evolucionar hacia intervenciones de salud pública adaptables, protegiendo la salud y el bienestar de las personas en todas las edades.
Es vital comprender a la VACUNACIÓN como una RESPONSABILIDAD SOCIAL INDIVIDUAL y COLECTIVA.