Al día de hoy, mucho ruido y pocas nueces
En el transcurso de los últimos días la relación entre el gobierno y la industria farmacéutica ha generado un sin número de artículos, notas, reportajes, transcendidos y rumores, algunos con cierto viso de credibilidad y otros claramente enunciados para la tribuna.
Los escarceos se produjeron a partir de una disputa de partes, sobre una tríada compuesta por:
- Licitación abierta para la compra de medicamentos por parte del Estado (ex Plan Remediar)
- Congelamiento de precios hasta 2017, sobre una canasta de 138 moléculas de uso frecuente
- Supuesto acuerdo sobre montos y cronograma de pagos para el resto de 2016, en el contrato PAMI – Industria
Al respecto parece ser que, tal como muchos lo están anunciado (aun sin la expresa confirmación de los directamente involucrados), las partes trabajosamente están llegando a un acuerdo final.
Incluso hay quienes en nuestro sector están celebrado el fin de las penurias de la red de farmacias argentinas, asegurando que el acuerdo supuestamente alcanzado no solo posibilitará el cobro a corto plazo de los saldos impagos, sino que aportará certeza y previsibilidad al cumplimiento de las obligaciones que tiene el administrador del contrato PAMI para con las farmacias hasta la finalización del presente año.
Ante tal estado de cosas, nos parece necesario manifestar que no compartimos tanta algarabía… o, por mejor decir, que deseamos mantener una actitud más cauta y vigilante: aun si llegaran a cumplirse las predicciones de los más entusiastas, poca cosa tendremos para festejar.
Por lo que pudimos saber, el acuerdo aún no sellado contiene modestas certezas y no pocas clausulas condicionales, las que actuarían como “corta fuegos” ante la aparición de diversas causas allí especificadas.
Es por eso que, sin ánimo de contradecir o polemizar con quienes han realizado otra lectura de esta realidad, nos resulta necesario señalar que nunca puede ser motivo suficiente para un festejo tan efusivo, el hecho de que otros se pongan de acuerdo limando diferencias de intereses individuales, mientras los farmacéuticos seguimos mirando las acciones desde la tribuna
Consideramos necesario, una vez más, señalar que la solución de fondo solo tendrá posibilidad de concretarse mediante nuestra inclusión, la cual necesariamente llegará por el camino del trabajo, las propuestas y la gestión constante, procurando siempre estar donde tenemos que estar, haciendo lo que debemos hacer
El camino no será corto, ni las soluciones llegaran mágicamente. Pero seguiremos por allí, porque no vemos que haya otra salida.
Y cuando realmente llegue el momento de festejar, seguramente estaremos como principales animadores, celebrando larga y efusivamente los avances que entre todos hayamos podido conseguir, en favor de la salud y permanencia de las farmacias argentinas.
Hasta la próxima
Prensa FEFARA
Julio de 2016