La Farmacia: un servicio público
En el universo de la salud, como en tantos otros, existen temas (generalmente controversiales) que mantienen permanente vigencia. Por caso, en estos últimos días mucha gente se ha ocupado y mucho se ha dicho acerca de la función social de la farmacia, poniendo especialmente el acento en los aspectos relacionados con el ejercicio profesional y la propiedad de las mismas
Sobre el particular, nuestra Federación quiere, una vez más, hacer públicas sus más sólidas convicciones en esta materia. A tal fin, recordemos los aspectos centrales del documento que, en el marco de nuestras Jornadas de Política, Economía y Gestión de Medicamentos, las entidades farmacéuticas nacionales suscribimos bajo la denominación de “Manifiesto de Pilar”:
“Las razones que sostienen esta afirmación, es decir la actividad de la farmacia como servicio público, son claras y concretas, a saber:
- A través de éstas se permite al paciente el acceso democrático al medicamento, unánimemente considerado un bien social, en cada centro poblado del extenso territorio nacional;
- Se encuentran sometidas a la regulación del poder público, quien establece las normas legales y reglamentarias para asegurar la regularidad de la prestación del servicio y la continuidad del mismo, porque existe un interés general en el desarrollo de la actividad;
- La farmacia comunitaria presta un servicio que beneficia a la sociedad en general, y no a una determinada clase o grupo, por importante que éste sea.
- La farmacia es el único establecimiento habilitado para la venta de medicamentos, drogas y especialidades farmacéuticas;
- Sostienen la carga publica de los turnos –cumplimiento del servicio más allá de los horarios comerciales- , para que a toda hora de cada día, sus servicios puedan ser demandados por quienes lo necesiten.
- Son un centro de salud de atención primaria, en el cual siempre se encuentra un profesional idóneo en la materia al servicio de la población en su conjunto;
- Las farmacias, resultan ser el primer y más cercano contacto sanitario, al que acude la población en procura de asesoramiento y orientación;
- Brindan atención a la totalidad de los beneficiarios del sistema de seguridad social;
- Resultan ser un pilar fundamental para el uso racional del medicamento;
- Realizan tareas de fármaco vigilancia;
- Dan sustento material al control de trazabilidad del medicamento dispuesto por las autoridades sanitarias;
Finalmente, y asumiendo el riesgo de ser considerado una redundancia, queremos señalar que siendo la farmacia una extensión del servicio profesional que brinda el farmacéutico resulta inaceptable que la propiedad de la misma se encuentre en manos de una sociedad anónima
Así lo creemos y por eso lo sostenemos poniendo todos los recursos a nuestro alcance. Hace ya tiempo que venimos litigando junto a nuestros Colegios, en las jurisdicciones en las cuales estas figuras societarias han pretendido ingresar, en total contravención con las legislaciones vigentes.